La tranquilidad que necesitas al alquilar tu vivienda
Hogar arrendador te ofrece todos los servicios esenciales para asegurar y ofrecerte la tranquilidad que necesitas al tener tu vivienda arrendada.
Seguros de hogar
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Alquilar una vivienda en propiedad puede ser una buena manera de sacarle una rentabilidad, pero si no tomas las precauciones adecuadas, tu vivienda de alquiler puede convertirse en un problema. Hogar arrendador es el seguro para tu piso alquilado que te ofrece los servicios más completos para que el alquiler de tu vivienda sea una experiencia libre de sobresaltos.
Hogar arrendador te ofrece todos los servicios esenciales para asegurar y ofrecerte la tranquilidad que necesitas al tener tu vivienda arrendada.
Incluimos el impago del alquiler de inquilinos problemáticos haciendo que alquilar tu vivienda esté libre de riesgo. También protegemos tu vivienda ante daños causados por el inquilino.
Cualquier imprevisto con tu inquilino o tu vivienda te puede llevar a los tribunales, por ello te ofrecemos la mejor protección jurídica ante cualquier problema o imprevisto. También puedes añadir coberturas adicionales como un seguro de protección del alquiler e impago de alquileres.
Disponemos de muchos servicios especializados para ser tu aseguradora y que el alquiler de tu vivienda esté libre de complicaciones y preocupaciones.
Te ofrecemos un servicio exclusivo ante el impago del alquiler de tu vivienda arrendada. Desde el momento en que haya una sentencia sobre el juicio de desahucio del inquilino, las cantidades impagadas por el inquilino quedan cubiertas siempre que se haya producido el impago de cuatro rentas mensuales consecutivas.
Hogar arrendador incluye un servicio de protección exclusiva ante daños vandálicos y malintencionados causados por el inquilino a tu vivienda. Esta garantía también incluye los daños a los bienes de tu propiedad que tengas en la casa para uso del inquilino.
La protección jurídica del arrendador es esencial para la reclamación de cualquier problema derivado del alquiler de tu vivienda. Ya sean desperfectos materiales o el impago del alquiler, nuestra protección jurídica te ofrece las soluciones necesarias ante cualquier eventualidad.
Existen muchas situaciones en las que tu casa y tus pertenencias pueden verse afectados por el fuego, bien por accidentes cotidianos o por otras circunstancias. En Plus Ultra Seguros te garantizamos los daños causados por la acción directa del fuego, por explosiones de instalaciones o aparatos de uso habitual, así como los provocados por la caída de rayo.
Una de las coberturas más frecuentes en los seguros de hogar es la referida a los daños producidos por agua, no en vano, figuran entre los siniestros domésticos más comunes. Los daños pueden provenir no sólo de tu propia vivienda, sino también de las contiguas. Escapes accidentales, roturas o grifos abiertos, son algunas de las situaciones que están cubiertas.
Entre los siniestros más habituales se encuentran los provocados por subidas de tensión, cortocircuitos o aparatos que se sobrecargan. Con Hogar arrendador protegerás tanto las instalaciones eléctricas de tu casa, como las averías de los aparatos eléctricos o electrónicos dañados como consecuencia de estos sucesos.
Aunque tu vivienda alquilada está preparada para la mayoría de los fenómenos atmosféricos, cuando ocurren con cierta intensidad pueden aparecer desperfectos.
Con tu seguro de hogar dispones de protección ante los daños producidos en tus bienes, tanto en los casos anteriormente descritos como si se producen filtraciones de agua en tejados y cubiertas, con independencia de la intensidad.
Muchos de los elementos que te rodean en tu vivienda alquilada son susceptibles de sufrir roturas. Esta cobertura te garantiza la reparación o reposición de espejos, cristales o mármoles, que formen parte de muebles o electrodomésticos.
También quedan cubiertos los cristales de puertas y ventanas, la placa vitrocerámica o de inducción, además de los aparatos sanitarios fijos, como lavabos, bañeras o inodoros.
El seguro Hogar arrendador está pensado para dar mayor tranquilidad a las viviendas de alquiler. Para ello, muchas veces se incluyen en los seguros de hogar coberturas específicas para proteger a los propietarios.
La cobertura de daños y vandalismo nos protege frente al deterioro de mobiliario, actos vandálicos o robo del continente. De esta forma la vivienda del asegurado queda protegida por un importe máximo que fijan las compañías. En caso de sufrir daños un perito será el responsable de comprobar el estado de la vivienda para responder a la indemnización correspondiente.
En caso de que los daños producidos impidan alquilar la vivienda durante un periodo de tiempo, la compañía se hace cargo de la pérdida de alquiler. Esta garantía se extiende durante el periodo que la vivienda esta inhabilitada, pero con un límite temporal o monetario fijado por la compañía.
Otra cobertura que garantiza la protección de las viviendas alquiladas es la protección frente al impago del alquiler, cubriendo la falta de pago del inquilino en mensualidades.
La responsabilidad civil cubre las reparaciones e indemnizaciones que el asegurado deba pagar por daños materiales y personales causados a terceros accidentalmente.
Estos daños pueden tener lugar tanto dentro como fuera de la vivienda (una teja que cae y golpea a alguien, un parqué levantado que provoca un tropiezo) y pueden tener su origen en la propia casa o ser causados directamente por el asegurado o los miembros de la familia que residan en ella. Por ejemplo, si tu hijo ha roto el cristal de un vecino, serás tú el responsable y a quien se le reclame la reparación.
Más allá de las averías y desperfectos producidos por el contenido o el continente, como pueden ser cortocircuitos o roturas de tuberías, esta póliza también puede cubrir los daños provocados por animales domésticos (siempre que no se trate de perros potencialmente peligrosos), los causados durante la práctica de deporte a nivel aficionado, una intoxicación alimentaria que causes a un invitado, etc.
En el caso de que la vivienda esté alquilada, el arrendador sólo es responsable de los daños producidos por el continente o el contenido de su propiedad, por lo que no es civilmente responsable de los daños causados a terceros que cometa el arrendatario. De modo que, independientemente de que el propietario del hogar también incluya esta cobertura en su póliza, es el inquilino quién debe cubrir su propia responsabilidad civil.